El ambiente es acogedor y la comida realmente deliciosa en el restaurante. La habitación era un poco pequeña para nuestra familia.

El jacuzzi al aire libre con vistas a la cascada resultó ser una experiencia bastante relajante, ideal para contemplar las auroras boreales. Además, la cercanía a los animales de la granja aporta un encanto especial al ambiente del lugar.

Sin embargo, el estado del jacuzzi que utilicé dejó mucho que desear. el material interior estaba dañado y las tapas de madera eran pesadas, incomodando al abrirlas. La zona del fuego fue decepcionante, solo había brasas y el ambiente no invitaba a pasar un buen rato, además el cobertizo al lado lleno de materiales le quitaba atractivo al área exterior.

experiencia acogedora pero con detalles a mejorar

El hotel tiene un ambiente encantador, con decoraciones que realmente crean una atmósfera acogedora. La calidad del desayuno destaca por sus productos artesanales, como el pan recién horneado, que es delicioso. Los jacuzzis ofrecen una vista impresionante de las montañas, lo que hace que la experiencia de relajación sea aún más especial.

La habitación triple era un poco más pequeña de lo esperado, lo que puede resultar incómodo para familias.

la cabaña era hermosa, pero tuvimos frío con una calefacción que no funcionaba, y el agua en la ducha se olvidó de aparecer. ¡Inconcebible! Además, esperaba un pequeño detalle de bienvenida o un upgrade, pero parece que el hotel prefiere ignorar a los huéspedes que saben lo que merecen. casi escribo un buen comentario, pero simplemente no pude.

Disfrutamos de un delicioso almuerzo en el restaurante, que cuenta con una hermosa sala de comidas y un servicio excepcional. La calidad de la comida, elaborada con productos locales, realmente destacó y hizo que nuestra experiencia fuera memorable.

Un detalle a mejorar sería el estado del jacuzzi, ya que el material interior estaba dañado y no se sentía del todo cómodo al usarlo.

el hotel tiene un ambiente acogedor y el personal es super amable, siempre dispuestos a ayudar. la comida en el restaurante rinde muy bien, especialmente el desayuno con pasteles frescos y ricos. en el jacuzzi al aire libre, las vistas son de locos, ideal para relajarte después de un día de turismo. la ubicación es perfecta para hacer paradas en ruta y descansar. todo está bien hecho para pasar una noche tranquila.

la habitación era justita y el baño tenía un diseño raro, el wc casi dentro de la ducha. la calefacción estaba un poco bajita, así q a veces hacía frío.

La habitación era muy acogedora y bonita, con detalles como albornoces y secador de pelo. Aunque era un poco más pequeña de lo que esperaba, la decoración le daba un toque especial. Además, el ambiente era tranquilo, ideal para relajarse. Sin embargo, noté que la calefacción no funcionaba a pleno rendimiento algunas noches, lo que fue incómodo. Pero en general, la experiencia fue muy agradable y cómoda.

La experiencia en Hraunsnef Country fue realmente placentera. Disfruté de un delicioso almuerzo en el restaurante, que cuenta con una hermosa sala de comidas y un servicio excepcional. La comida era un festín, especialmente los productos locales con los que prepararon la comida. Además, el ambiente acogedor y la calidad de la atención hicieron que mi estancia fuera muy agradable.

La habitación era un poco pequeña.

Una experiencia encantadora en la naturaleza

El hotel ofrece un ambiente acogedor y limpio. Disfrutamos mucho del jacuzzi al aire libre con vistas impresionantes. La comida local fue el mayor hallazgo, realmente deliciosa. Recomiendo explorar la caminata cerca del hotel, es espectacular. ¡No te la pierdas!

Las instalaciones eran acogedoras y limpias, y el desayuno era increíble, especialmente los productos locales como los gofres y el pan horneado. Los jacuzzis al aire libre son perfectos para relajarse tras un día explorando. El personal siempre fue muy amable y atento.

Sin embargo, la calefacción en la habitación no funcionaba adecuadamente, lo que hizo que algunas noches fueran frías.

Habitaciones pequeñas pero con un desayuno espectacular y un ambiente encantador

deliciosa comida, buena limpieza, habitaciones pequeñas

La habitación era limpia y acogedora, con una ducha del tesoro y cena deliciosa. El desayuno era el mejor, ¡casi me hace llorar de felicidad!

No cabía una maleta más, creo que todos llevamos el armario en el coche.

Estada genial en un lloc tranquil, amb vistes precises. El jacuzzi exterior, una passada després d'un dia de caminar. Esguardant les estrelles i les llums del nord, sense dubte una experiència inoblidable.

Disfrutamos del jacuzzi con vistas increíbles, pero hacía frío en la cabaña.